La medicina alternativa o complementaria comprende un extenso espectro de
filosofías curativas o escuelas de pensamiento, que la medicina occidental
convencional normalmente no utiliza, no reconoce, no estudia, no comprende y
por lo tanto no las hace viables.
Muchas de las terapias citadas se llaman holísticas, lo que
generalmente significa que ellas consideran a la persona en su totalidad,
incluyendo sus aspectos físico, mental, emocional y espiritual.
Podríamos decir que todos estos métodos tienen algo en común
que es el campo de lo que se ha dado en llamar "las energías
sutiles", fenómenos ondulatorios electromagnéticos que actualmente están
siendo estudiados por algunos científicos en el mundo, pero que todavía no son
los suficientes como para influir en la gran comunidad científica, que
finalmente es la que tiene que concretar cambios más radicales y prácticos en
la medicina oficial.
Es así como a los profesionales de la salud que han
subestimado el valor de las terapias alternativas o complementarias por
considerar que son poco científicas, les podemos advertir que gradualmente ha
ido creciendo el número de prestigiosos científicos que las están investigando
seriamente y están comprobando los efectos positivos de éstas.
Les podemos asegurar responsablemente que cuando se
combinan los métodos terapéuticos adecuados con una correcta actitud de
compromiso de la persona en tratamiento, hemos presenciado verdaderos prodigios
en la recuperación de graves dolencias.
Fuente:
- http://www.ohani.cl/